El hotel tiene habitaciones muy amplias y acogedoras, lo que fue un gran punto a favor para nuestra estancia. A pesar de que la ducha de nuestra habitación no tenía buena presión, el desayuno era completo y disfrutamos de la variedad que ofrecían. Nos alojamos una noche y nos aprovechamos de la cercanía a la Chiesa di San Pietro Martire, que está a solo un corto paseo.

Muy recomendable para quienes buscan relax

La atención del personal fue increíble, siempre dispuestos a ayudar y te hacen sentir como en casa. Además, el desayuno era simplemente delicioso, con opciones variadas y siempre fresco.

No fue barato, pero lo considero aceptable para lo que ofrecen.

Aprovechen el acceso al parque cercano, ideal para disfrutar de paseos al aire libre y relajarse en medio de la naturaleza.

La comida mediterránea fue un viaje! Cenamos en una Trattoria del Biasin a solo un saltito del hotel y cada plato era pura magia. Las habitaciones son súper cómodas, ¡perfectas para relajarse después de un día explorando!

Debido a un malentendido con Booking.com, nuestra reserva no llegó al hotel. Pero, ¡vaya que el personal fue un ángel! Nos dieron una habitación agradable y el desayuno gratis, así que todo brilló al final.

La experiencia fue horrible, la habitación estaba llena de hongos y, para colmo, la ducha no tenía presión. Esperaba un upgrade o al menos una disculpa, pero ni eso. Casi escribo una buena reseña, pero simplemente no pude. Menuda decepción, no entiendo cómo pueden llamarse un hotel decente.

Estuve dos noches en un lugar que se siente alejado del bullicio. El ambiente es tranquilo y me gustó poder relajarme después de un día explorando la zona. Cenamos en el bar del hotel, disfrutando de vistas al jardín, una experiencia que añadió un toque agradable a nuestra visita. Además, había un servicio de tren a Milán, que resultó útil.

La distancia a Milán puede ser un inconveniente, y no hay muchas opciones de restaurantes en el pueblo. El taxi al centro de Milán puede costar mucho.

La habitación era limpia y cómoda, con un diseño único y detalles históricos que me encantaron. Las camas eran súper cómodas, ideal para descansar después de un día explorando. Aunque el aire acondicionado no funcionaba muy bien al principio, eso no arruinó mi experiencia. El parque cercano le añade un toque genial para pasear.

Encantador lugar, ideal si buscas disfrutar de un desayuno delicioso con vistas al jardín y habitaciones cómodas y limpias que te invitarán a relajarte.

La habitación fue espaciosa y perfecta para nuestra familia. La ubicación cercana al parque fue ideal, sobre todo para los niños, ya que disfrutamos de mucho tiempo al aire libre jugando. El desayuno variado ayudó a que todos comenzaran el día con energía.

Mi mujer dice que habría sido bueno tener más opciones de entretenimiento para los niños durante nuestra estancia.

Pasamos un gran tiempo con amigos. Disfrutamos del desayuno variado cada mañana y aprovechamos la cercanía a un parque bonito para pasear. Nos encantó explorar las actividades locales y el ambiente tranquilo del lugar fue perfecto después de un día de golf. El tren a Milán estaba a solo unas cuadras, lo cual fue muy práctico para salir a conocer.

Sin embargo, durante nuestra estancia había un grupo de jóvenes afuera que hacían ruido y era difícil dormir hasta que se fueron, lo que afectó un poco nuestras noches.

Buen hotel, pero con detalles que mejorar

El hotel está muy bien ubicado al lado de un parque bonito. Las habitaciones son amplias y cómodas, lo cual es genial para descansar. Pero el aire acondicionado no funcionaba bien los primeros días y hacía bastante calor. El desayuno era variado y rico, pero si llegas tarde a la sala, las opciones se acaban rápidamente.

La habitación era acogedora (me encantó el diseño) y el desayuno muy bueno, con variedad. La ubicación cerca de la estación de tren facilitó mucho los movimientos a Milán.

Estoy absolutamente satisfecho.

habitaciones amplias y confortables en un entorno encantador

habitaciones acogedoras, desayuno completo

aislacion deficiente